Los alimentos y la huella de carbono

Pocos  consumidores estamos conscientes de que lo que elegimos comer afecta el medio ambiente, y por ende nos afecta a todos. Los diferentes alimentos tienen impactos distintos en el entorno; unos son prácticamente inofensivos a la salud y el planeta, y otros, en cambio, lo dañan profundamente.

Para ilustrar lo anterior, la organización internacional Environmental Working Group (EWG)  elaboró una sencilla y colorida gráfica que muestra cuáles son los alimentos más contaminantes y cuáles, por el contrario, los más ecológicos.

Las lentejas figuran en la lista como los alimentos más “verdes”. Además de ser una excelente fuente de fibra, nutrientes y proteínas, su cultivo no daña el medio ambiente. No se transportan en grandes distancias, y por lo tanto no contribuyen a la liberación de gases nocivos para la atmósfera.

Otros alimentos ecológicamente amigables son los tomates, la leche orgánica, los frijoles, el tofu, el brócoli las nueces y el yogur orgánico y bajo en grasa. Entre los alimentos no tan amigables, se encuentran la mantequilla de maní, el arroz blanco, las patatas (contienen altas dosis de residuos de pesticidas), los huevos y el atún. Para transportar estos alimentos se han recorrido mayores distancias, y para su cultivo suelen usarse fertilizantes y pesticidas. El atún puede contener mercurio y se encuentra en peligro debido a su pesca excesiva, por lo que se recomienda limitar su consumo.

En cuanto a los alimentos “rojos”, éstos son los menos amigables con el medio ambiente. Su huella de carbono es muy superior a la de los verdes, pues han recorrido largas distancias para su distribución en centros de consumo. Además, contienen altas dosis de hormonas, antibióticos y otras sustancias que se acumulan en el cuerpo humano. Tal es el caso de las carnes, en especial la de puerco,  el pollo, el salmón y los quesos.

Tal es la importancia de ser un consumidor responsable. Elegir productos orgánicos y reducir el consumo de carne, o consumir solamente carne orgánica, no es una elección individual; es una decisión que nos afecta a todos.

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